Dia 8

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Jueves 3, ultimo día completo en Bariloche. Nos levantamos y desayunamos en el hotel, que incluía un super desayuno! Con te, cafe, leche, chocolatada, galletitas de agua, galletitas surtida,s facturas, medialunas, fiambres, yogures, cereales, jugos, etc..

El plan del día era,  originalmente, ir a comer asado a las piedras en la Colonia Suiza. Pero el día estaba lluvioso, feo, así que optamos por ir a preguntar en información al turista, cuales podían ser las actividades para un día feo como ese. La respuesta fue, o visitar algún museo, o ir a la colonia suiza.
Al salir del hotel, el chico que atendía en la puerta, nos había recomendado un lugar para comer, que era un puestito de comida rápida, que era barato y abundante. Así que nos fuimos a chusmear que onda el lugar, ya que no pretendíamos gastar en restoran los días que nos quedaban. El barcito este, abría a las 12, así que nos fuimos a hacer algunas compras para los familiares, ya que estabamos en el centro.
No me acuerdo los precios, pero alrededor de $29 un sanguche de milanesa con papas y gaseosa, PERO le podías poner las salsas que quisieras, y eso incluia berenjenas al escabeche, chimichurri, zanahoria, tomate,lechuga, choclo, guacamole, chucrut, ajies, pickles, papitas, etc etc etc.
Compramos un sanguche, y le pusimos cada uno lo que quiso a su mitad, y lo fuimos a comer al hotel. Ya con la pansa llena a Ivan le agarro sueñito y se tiro un ratito a dormir.
La lluvia había frenado bastante, y como teníamos un mapita de las paradas y horarios de los micros, nos encaminamos a la colonia suiza. Asombrosamente el micro nos costo $6 a cada uno, la Colonia estaba medio deshabitada, porque el día no había mejorado mucho y era justo el horario en que no haces nada, porque ya almorzaste pero es temprano para merendar. Recorrimos un poco, y encontramos un puesto de informacion donde escuchamos un poco la historia de como se había formado la colonia. Sinceramente lo único positivo que vi fueron las plantaciones de frutos rojos, porque lo demás eran ferias artesanales como las que hay en todas partes, o hasta peores.
Nos metimos en una de las huertas, que habíamos escuchado que era la mas antigüa, y compramos una caja de frambuesas, la mujer que estaba a cargo, tenia una carpeta con fotos de todas las plantas de las diferentes especies de frutos. Y nos dijo que al final de la calle, bajando al lago había muchas plantas silvestres de frutos. Con el termo lleno, y media caja de frambuesas (ricasss) bajamos al lago.
Al principio nos confundimos el camino, y terminamos en un vivero que tenía unas lagunitas, y caminos mezclados, cuando pudimos salir del vivero (nos perdimos ahí adentro), volvimos, preguntamos y llegamos al lago. Pero no era la gran cosa, en la costa del lago había un camping, entonces las plantas de zarzamoras que nos habían dicho, estaban totalmente vacías.
Después de dar un par de vueltas mas, decidimos volver para Bariloche, porque el micro pasaba cada una hora, compramos otra cajita de frambuesas y esperamos el micro.
En vez de bajarnos en el hotel, seguimos hasta la otra punta del centro, donde encontramos el Shoping que Agustina me había hablado, que ahí vendían las golosinas que a mi me gustaban.
Increíble que recién en el día 8 se me ocurre nombrar las golosinas que en verdad nos salvaron las vacaciones. En el aeropuerto, después de los sanguchitos, mi papa nos ofreció comprarnos algo de postre en el kiosco, y yo elegí unas pastillitas de azúcar con carita feliz, que solía comer en el colegio. De las cuales comí 3 y el resto las guarde, y a lo largo de todas las vacaciones, comíamos dos o tres por día en los momentos que necesitábamos azúcar.
Cuestión que Agus me había dicho que en ese Shoping las vendían, así que fuimos hasta allá para comprarlas,  por supuesto cuando llegamos el chico con cara de feliz cumpleaños me dijo "Ay, no.. de esas no me quedan mas" Pero era un puestito que vendía exclusivamente golosinas copadas, y compramos un montón, gomitas, chicles y caramelos. El shoping por lo demás era normal, así que nos volvimos (en micro, obvio) hasta el hotel.
Habíamos visto que en el restoran en el que habíamos cenado la noche anterior, había "Pizza Libre" a partir de las 8, y los mozos nos habían dicho que se llenaba, que vayamos temprano.
Llegamos, y había una mesa para dos libre, se nos acerco un mozo y nos explico la modalidad del menú. Uno pedía la bebida, y de las variedades de pizza que había elegía el sabor que quisiese, y te lo traían (mínimo media pizza). "Puta madre", eramos dos nomas, y queríamos probar casi todas, lo cual eran aprox, dos porciones de cada sabor, y media pizza trae 4 porciones. Medio resongando, pedimos media y media, de lo cual comimos una porción cada uno de cada una, y yo quería otra cosa. Ivan comió una porción mas y llamamos a la moza y pedimos si podían traernos de otro sabor, así que sin chistar la chica se llevo la tabla (con las porciones que quedaban) y nos trajeron lo que quisimos :D
Para después de comer, habíamos quedado con Agustina que nos íbamos a ver un rato, así que le mande mensaje y la esperamos justo frente a una vidriera que tenía en venta una campera que a Ivan le interesó, entró, se la probó, le gustó y se la compró.
Nos paso a buscar Facu (el primo de agustina) y caminamos como 5 cuadras hasta donde el estaba viviendo. Cuando llegamos, Agus, Facu y dos compañeros de Francés de Agus (con los que ella estaba de vacaciones) se estaban preparando un arroz para comer.
Nos quedamos un rato charlando con ellos, y cuando nos agarro sueñito, nos volvimos al hotel, comimos unas frambuesas, manchamos la sabana de rojo y a dormirr...